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Varios feligreses de la Parroquia se reúnen semanalmente con el Párroco, que les está ayudando a aprender a tocar la guitarra española con el fin de poder después, en un segundo paso, formar un coro parroquial en el que haya más fieles que se unan con sus voces.
De esta manera se pretende crear un coro en la parroquia que anime con el canto las celebraciones litúrgicas parroquiales, especialmente la de la Eucaristía parroquial de los domingos a la que asisten los niños de catequesis y sus familias. Esta iniciativa también propicia la convivencia entre sus integrantes que algunas noches, tras las clases de guitarra, cenan juntos en el salón parroquial.
