La mañana del día 8, fiesta de la Virgen de la Piedad, ha amanecido con lluvias que se han prolongado a lo largo de la jornada de manera intermitente pero permitiendo una tregua que ha coincidido con la celebración de la Santa Misa presidida por el Administrador Diocesano, en la Iglesia de Ntra. Sra. de la Piedad.
Por la tarde, el Párroco consultaba a la Junta de Gobierno de la Hermandad de la Piedad ante la amenaza de tormentas, teniendo que tomar la difícil decisión de suspender la salida procesional de la imagen de la Virgen de la Piedad prevista para las 20:00 horas, algo que ha sido inédito porque no se tiene constancia histórica alguna de que esto haya sucedido antes, por lo menos en los últimos cien años. Tan sólo se conoce la suspensión por tormentas de la procesión que se hacía en la tarde del 15 de septiembre y, en todo caso y a lo sumo, tener que regresar de recogida al templo antes de lo previsto en la tarde del 8 de septiembre.
Ante este hecho insólito se ha improvisado el rezo del Santo Rosario, que ha sido dirigido por el Administrador Diocesano y que se ha desarrollado en el interior del templo, acompañando así a la imagen de la Virgen de la Piedad que ha estado arropada en todo momento por sus horquilleros y el resto de la Hermandad de la Piedad como de numerosos fieles. Después de este acto mariano, han sido muchos los fieles que han permanecido o que se han acercado para visitar a la patrona hasta que las puertas del templo se cerraron cerca de las 22:00 horas.
Recordamos que la próxima salida de la imagen de la Virgen de la Piedad, si el tiempo lo permite, será en el Rosario de la Aurora previsto para el domingo 7 de octubre, a las 08:00 horas.