domingo, 26 de abril de 2015

RECUPERADA LA FUNCIONALIDAD DEL ANTIGUO BAPTISTERIO DE LA IGLESIA DE SAN JUAN BAUTISTA.

Se recupera este lugar con la colocación de la Pila bautismal, para que sean acogidos en la Iglesia los nuevos bautizados.


EL BAPTISTERIO (LUGAR DE LOS BAUTISMOS) DE LA IGLESIA DE SAN JUAN BAUTISTA, CONSTRUIDO A AL MISMO TIEMPO QUE EL TEMPLO Y JUNTO A SU ENTRADA, SOBRE EL QUE SE ELEVA LA TORRE CAMPANARIO, VUELVE A SER EL LUGAR EN EL QUE SE CELEBRARÁ EL SACRAMENTO DEL BAUTISMO DE LOS NUEVOS CRISTIANOS.

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Con el nombre de baptisterios se designan las pequeñas iglesias y capillas destinadas a la administración del sacramento del Bautismo. Estos lugares pueden estar aislado de los templos, adosados a ellos o dentro de los mismos. En ellos se encuentra la Pila bautismal.

El Baptisterio de la Iglesia de San Juan Bautista es de planta cuadrada sobre la cual se eleva la torre campanario. El Baptisterio es de la misma época de la construcción cristiana del Templo en el siglo XVI. Destaca en nuestro Baptisterio su artesonado. En esta Capilla del Baptisterio se encuentran tres de las imágenes titulares de la Cofradía de la Esperanza: La Virgen de la Esperanza, el Santísimo Cristo del Amor y San Juan Evangelista.


En la tradición de la Iglesia católica siempre se ha procurado que en todas las catedrales, basílicas mayores y templos parroquiales existiera la Capilla del Baptisterio en la cual se ha de encontrar la Pila Bautismal y en la que se han de realizar las celebraciones bautismales. 

Estas Capillas solían estar a la entrada de los templos para darle el sentido de que sólo una vez que una persona se ha convertido en cristiano por el sacramento del Bautismo, puede acceder a las otras partes del templo para recibir y participar en los demás sacramentos. 



El no bautizado, acompañado de sus padrinos y demás familiares, es recibido y acogido por el Obispo o el sacerdote y la comunidad cristiana a la entrada del templo, en la Capilla del Baptisterio. Allí recibe el sacramento del Bautismo. Después, si el neófito (nuevo bautizado) es un adulto, se desplaza hasta el Presbiterio (Altar Mayor) donde recibe los dos restantes sacramentos de la Iniciación cristiana: la Confirmación y la Eucaristía.

Así ya aparece en las normas litúrgicas y en el Derecho Canónico; también en el número 91 de las normas pastorales del nuevo Directorio Diocesano de la Iniciación Cristiana.




Existe también la costumbre cristiana de colocar a la entrada de los templos unas pilas donde siempre hay agua bendita para que al entrar los ya bautizados se santigüen con esta agua en señal y recuerdo de su bautismo y de su identidad de hijos de Dios y miembros de la Iglesia, el nuevo pueblo de Dios.

Nuestro Párroco, que acostumbra presentar a la Virgen María al bautizado o bautizada con una oración, una vez ha terminado la celebración litúrgica del sacramento del Bautismo, a partir de ahora hará esa presentación de los nuevos bautizados ante la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, que se halla en el retablo de la misma Capilla del Baptisterio.